La reproducción
¡Menudos hombrecitos!
Hace muchos años, en la época en que la gente se alumbraba con velas y se entretenía escuchando historias al amor de la lumbre, el fabricante de microscopios Leeuwenhoek descubrió los espermatozoides. Lo primero que pensó al verlos es que podrían ser pequeñísimos animales que se movían a sus anchas. Más tarde, supuso que se trataba de semillas que se desarrollaban en el cuerpo de la mujer para que se formara un niño. Una curiosa idea, ¿verdad?
No menos sorprendente fue la explicación de su colega Hartsoeker, que décadas después creyó ver en los espermatozoides hombres completos, pero minúsculos. El científico supuso que, después, crecían y crecían en el vientre de las madres hasta convertirse en bebés.
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1. Las etapas de la vida y los caracteres sexuales
Fíjate en el álbum de fotografías de los hermanos Diego y María. ¿En qué momento se hicieron más evidentes las diferencias entre ellos?
Las características físicas que distinguen a los hombres y a las mujeres se llaman caracteres sexuales. Estas diferencias se hacen más o menos evidentes según la fase o etapa de la vida en la que nos encontremos.
Las etapas de la vida
A largo de nuestra vida, las personas atravesamos tres etapas: la infancia, la adolescencia y la edad adulta.
- La infancia abarca desde el nacimiento hasta los 12 años de edad, aproximadamente. Durante los primeros años de vida, los niños y las niñas crecen muy rápidamente y adquieren múltiples habilidades como caminar, hablar y leer, por lo que se vuelven cada vez más autónomos.
- La adolescencia comprende desde los 12 hasta los 19 años de edad, aproximadamente. Entre los 11 y los 15 años tiene lugar la pubertad, etapa en la que los aparatos reproductores de chicos y chicas alcanzan su madurez y capacidad fértil. Esta etapa también se caracteriza por la aparición de diferencias físicas claras entre los chicos y las chicas.
- La edad adulta abarca, aproximadamente, desde los 19 años hasta el fin de la vida, y se divide en tres etapas: la juventud, la madurez y la ancianidad.
Los caracteres sexuales
Los caracteres sexuales que diferencian a los hombres y a las mujeres pueden ser de dos tipos:
- Caracteres sexuales primarios: son los órganos reproductores femenino y masculino. En el momento del nacimiento estos órganos ya están formados y permiten diferenciar si un recién nacido es una niña o un niño.
- Caracteres sexuales secundarios: son diferencias físicas entre los hombres y las mujeres que se hacen más evidentes durante la pubertad. A lo largo de esta etapa, el cuerpo de los chicos y de las chicas comienza a experimentar una serie de cambios, como la aparición de vello en el pubis y en las axilas. Además, se producen cambios específicos en cada sexo:
- En los chicos, la voz se vuelve más grave, se ensanchan los hombros, la nuez se hace más evidente y en su rostro comienza a crecer el bigote y la barba.
- En las chicas, se desarrollan las mamas y sus caderas se van ensanchando.
- Las etapas de la vida son: infancia, adolescencia y edad adulta.
- Los caracteres sexuales pueden ser primarios o secundarios.
2. Los aparatos reproductores
¿En qué se diferencian el aparato reproductor masculino y el femenino?
El aparato reproductor masculino
El aparato reproductor masculino está formado por los siguientes órganos: los testículos, los conductos deferentes, las vesículas seminales, la uretra y el pene.
El aparato reproductor femenino
El aparato reproductor femenino está formado por los siguientes órganos: los ovarios, las trompas de Falopio, el útero, la vagina y la vulva.
- El aparato reproductor masculino está formado por los testículos, los conductos deferentes, las vesículas seminales, la uretra y el pene.
- El aparato reproductor femenino está formado por los ovarios, las trompas de Falopio, el útero, la vagina y la vulva.
3. Las células sexuales y la fecundación
Al igual que el resto de organismos vivos, los seres humanos realizamos las tres funciones vitales: la función de nutrición, la función de relación y la función de reproducción.
Gracias a la función de reproducción, los seres humanos originamos otros seres semejantes a nosotros y así aseguramos la continuidad de nuestra especie.
Los seres humanos tenemos un tipo de reproducción sexual. Esto significa que, para que se forme un nuevo ser, es necesario que se produzca la unión de dos células sexuales, una femenina y otra masculina, es decir, un óvulo y un espermatozoide. Este momento de la reproducción recibe el nombre de fecundación.
Las células sexuales
El aparato reproductor masculino produce espermatozoides, y el aparato reproductor femenino produce óvulos. Estas dos células sexuales son muy diferentes.
Espermatozoides
Los espermatozoides son las células reproductoras masculinas. También reciben el nombre de gametos masculinos.
Su tamaño es muy pequeño y en ellos se pueden diferenciar tres partes: la cabeza, el cuello y la cola o flagelo. Gracias a su flagelo estas células pueden moverse.
Los espermatozoides comienzan a formarse en los testículos durante la pubertad.
Óvulos
Los óvulos son las células reproductoras femeninas. También se llaman gametos femeninos.
Tienen forma redondeada, su tamaño es mucho mayor que el de los espermatozoides y no tienen capacidad de moverse.
En el momento del nacimiento, las niñas tienen en su aparato reproductor un gran número de óvulos inmaduros.
Estas células madurarán en la pubertad. A partir de ese momento, estarán preparadas para ser fecundadas.
La fecundación
Cada 28 días, aproximadamente, un ovario libera un óvulo, que es arrastrado a través de las trompas de Falopio hacia el útero. Si durante ese recorrido el óvulo se encuentra con un espermatozoide, puede ser fecundado. La fecundación se produce cuando el espermatozoide alcanza el óvulo y consigue entrar en él.
A partir de ese momento, el óvulo fecundado o cigoto comienza a dividirse y recibe el nombre de embrión. Cuando el embrión llega al útero, se fija en sus paredes, es decir, se implanta, y sigue creciendo. Observa en el siguiente dibujo cómo se produce la fecundación.
- Los espermatozoides son las células reproductoras masculinas, y los óvulos las células reproductoras femeninas.
- La fecundación es el proceso de unión de un óvulo y un espermatozoide en una de las trompas de Falopio.
4. El embarazo y el parto
El embarazo dura aproximadamente nueve meses y termina con el parto. Durante este tiempo se producen muchos cambios, tanto en el embrión como en el cuerpo de la mujer.
La formación de la placenta
Durante las primeras fases del desarrollo del embrión, se crea un tejido en la pared del útero donde se ha producido la implantación. Este tejido, que se llama placenta, se encarga de captar el oxígeno y los nutrientes de la sangre de la madre. Dichas sustancias son las que necesita el bebé para crecer y desarrollarse. El cordón umbilicalune la placenta con el bebé y a través de él, viajan los nutrientes y el oxígeno que capta la placenta.
Al mismo tiempo que se desarrolla la placenta, también se forma la bolsa amniótica. En su interior está el líquido amniótico, que rodea y protege al embrión.
De embrión a feto
Durante los nueve meses que dura el embarazo, el embrión evoluciona y se prepara para el momento del nacimiento. Los cambios más importantes que ocurren durante este período son:
- Primer trimestre. Durante los dos primeros meses, aproximadamente, el cerebro del futuro bebé comienza a desarrollarse, su corazón late y aparecen unos pequeños bultos que, con el tiempo, serán sus brazos y sus piernas. Al final del primer trimestre el embrión recibe el nombre de feto. En ese momento tiene ya formados los órganos, que comienzan a funcionar, a excepción de los pulmones, que se estrenarán en el parto.
- Segundo trimestre. En este período el feto ya puede oír, se chupa el dedo, abre y cierra los ojos, y su madre comienza a sentir cómo se mueve.
- Tercer trimestre. A lo largo de los tres últimos meses, el feto crece y gana peso, de modo que, durante el octavo mes pesa ya entre dos kilos y medio y tres kilos. Sus órganos han madurado, por lo que está listo para poder vivir fuera del vientre materno. Los bebés que nacen antes de ese momento se consideran prematuros y, generalmente, necesitan cuidados especiales después del parto.
Primer trimestre
Segundo trimestre
Tercer trimestre
El parto
El parto es el momento del nacimiento del bebé y se desarrolla en tres etapas: la dilatación, la expulsión y el alumbramiento.
- Durante la dilatación, la zona del útero que se une a la vagina se dilata poco a poco hasta alcanzar un diámetro de unos 10 centímetros. Además, se producen contracciones rítmicas que empujan al feto hacia la vagina.
- La fase de la expulsión consiste en la salida del feto al exterior a través de la vagina. Cuando el bebé sale al exterior, la persona que atiende el parto corta el cordón umbilical. Después de unos segundos, el bebé inspira aire por primera vez y llora.
- El alumbramiento es la última fase del parto. En ella se produce la salida de la placenta al exterior.
- En las primeras fases del desarrollo del embrión, también se forman la placenta, el cordón umbilical, la bolsa amniótica y el líquido amniótico.
- El parto consta de tres fases: la dilatación, la expulsión y el alumbramiento.
Organiza tus ideas
Diccionario científico
Bolsa amniótica: Cavidad llena de líquido amniótico en la que se desarrolla y está protegido el bebé antes de su nacimiento.
Cordón umbilical: Conducto que une la placenta de la madre con el vientre del feto.
Placenta: Órgano de tejido esponjoso que se desarrolla en el interior del útero en el embarazo.
Curiosidades:
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